Digamos que un día entras a trabajar como siempre a la oficina a eso de las 8 de la mañana… esperas que sea un día normal, con el normal agobio de trabajo y el normal estrés que llevas aguantando desde el mes de septiembre. Cuentas con quedarte un rato por la tarde, como llevas haciendo con una cierta frecuencia desde hace un par de meses, pero piensas salir a eso de las 7 de la tarde para poder disfrutar un poco de la tarde…

…y terminas saliendo a las 4 de la mañana sin ni siquiera haber salido a comer…

Mi vida últimamente se limita a de casa al trabajo y del trabajo a casa… menos mal que mañana es viernes y empezamos ya con las celebraciones pre-navideñas.

Planes para los próximos días:

Viernes --> Cena en la hípica con los compañeros/as del chollo
Sábado --> Cena con los amigos pendiente de decidir
Domingo --> Comida por el cumpleaños de mi hermano Víctor en casa de mis padres.
Miércoles --> Cena de la Corporación Caixa Galicia en el Hotel Barceló…

…menos mal que estoy tomado vitaminas para aguantar el ritmo de estas Navidades…