Desde luego ha sido un fin de semana de sorpresas. Por una parte la electoral: En A Coruña, después de algo mas de un par de décadas de gobierno con mayoría absoluta del PSOE, este se va a ver obligado a gobernar junto al Bloque. Creo que esto va a ser beneficioso para la ciudad, puesto que en los últimos años nos habíamos embarcado en grandes obras, como el ascensor panorámico, el tranvía, etc... y se estaban dejando de lado temas tan importantes como la inseguridad ciudadana y los barrios.

Espero que con la entrada en el gobierno del Bloque, el PSOE se replantee su política de los últimos años y mire mas por los ciudadanos...

Y por otra parte, el domingo he recibido (aunque ya lo sabia desde hace muchos meses) la invitación de boda de mi hermano pequeño. Confieso que me he emocionado. Cuando la estaba mirando se me venían las lagrimas a los ojos. Y es que nos llevamos 14 años de diferencia y le he cambiado los pañales. Es emocionante ver como aquel bebé al que cambiaba los pañales y ayudaba a bañar se ha convertido en todo un hombre que esta empezando a formar su propia familia...