Acojonaito estoy con la sabiduría popular... y es que desde hace unos días mi niña no dormía bien (y por añadido, yo tampoco) con motivo de una tos recalcitrante...
Y es que lo habíamos probado todo: jarabe, caramelos, miel... pero no había manera: se pasaba la noche despierta tosiendo.
Hasta que ayer tarde nos dieron el remedio casero: pelar una cebolla, partirla en dos y dejar los trozos metidos en un vaso con agua al lado de la cama.
La verdad es que por la mañana no se aguantaba en la habitacion con el olor a cebolla, pero NO HEMOS TOSIDO NI UNA VEZ EN TODA LA PUTA NOCHE.
No hay comentarios:
Publicar un comentario